Las cebollas frescas y comibles son firmes, gorditas y secas. Si una cebolla tiene puntos blandos, máculas negras o si las capas particulares son blandas u oscuras, esto señala moho y podredumbre. Si bien la cebolla no huela mal, es preferible tirarla.
- Sensación: las cebollas enteras han de estar blandas y firmes. Si tienen zonas blandas, quiere decir que comenzaron a deteriorarse.
- Para cebollas partidas en el medio, picadas o en rodajas: se echarán a perder si tienen una textura viscosa.
- Fragancia: Las cebollas que comienzan a pudrirse asimismo comienzan a olfatear mal.
¿De qué forma comprender si una cebolla se hechó a perder?
Entender si una cebolla se hechó a perder es más esencial de lo que crees; ¡Tras todo, absolutamente nadie desea una sorpresa desapacible al morder su comida! A dios gracias, existen algunas señales que tienen la posibilidad de contribuir a tomar esa determinación. El signo mucho más visible de deterioro es el fragancia: una cebolla en estado deplorable va a tener un fragancia agrio y picante, o aun avinagrado.
Además de esto, tu piel ha de estar seca y escamosa al tacto; si está viscoso o húmedo, probablemente no esté en las mejores condiciones. Al final, en la inspección, sus capas aún han de estar bien unidas y adheridas; si no tiene integridad, entonces empezó a deteriorarse. Si bien las cebollas son una verdura parcialmente fuerte, temporada tras temporada, ¡algo de supervisión jamás está de sobra!
Conservación industrial
La conservación industrial necesita reforzar un tanto mucho más. Un óptimo almacenaje refrigerado te deja extender la vida útil de las cebollas:
- Primeramente, usa los bulbos de cuello abultado, puesto que son los mucho más viejos y duran menos que los mucho más pequeños.
- Examinar periódicamente la cámara frigorífica donde se guardan las cebollas y tirar las que se comiencen a pudrir.
- La temperatura ha de ser la correcta a fin de que la cebolla no se pudra, llegando hasta 1 ºC y la humedad debe sostenerse entre el 65 y el 75%.
- Asimismo hay que tener en consideración una adecuada distribución del aire dentro de la cámara para una mejor homogeneidad.
Las cebollas cocidas asimismo tienen que guardarse en el frigorífico
Si por servirnos de un ejemplo has frito o escalfado unos trozos de cebolla y te sobran, no los tires por el hecho de que si las guardas en estupendas condiciones en la heladera, las puedes volver a usar para otras recetas. Para esto, tienes que guardarlas de esta manera que las cebollas cortadas crudas, esto es, en una bolsa o envase hermético, pero no las ubiques justo después de la cocción, tienes que aguardar un tanto a que se enfríen. Si lo haces bien, tienen la posibilidad de perdurar de 3 a 5 días. Si no tienes tiempo de consumir la cebolla cocida en los próximos 5 días, asimismo puedes guardarla en el freezer, donde lograras sostenerla congelada hasta por 3 meses.
Si comienzas a ingresar estos nuevos hábitos para eludir que tus cebollas se echen a perder, vas a ver que prontísimo vas a aprender a distinguir en el momento en que una cebolla está podrida o en estado deplorable para comer. Para ofrecerte ciertas pistas, el cambio de color es la manera mucho más obvia de comprender si una cebolla ahora está mala, con lo que si la ves con máculas grises, cobrizos o blancas, quiere decir que es imposible comer.
¿Cuánto dura la cebolla en el frigorífico?
treinta días El frigorífico puede, por servirnos de un ejemplo, deshidratar pan, ablandar patatas y endurecer miel. Y lo creas o no, esta regla asimismo se aplica a las cebollas, que tienen la posibilidad de perdurar hasta treinta días.
¿De qué forma preservar mucho más tiempo las cebollas?