La DMT es popularmente conocida como la ?molécula de Dios?, gracias a su enorme poder alucinógeno, siendo entre las drogas de este género mucho más poderosos que hay.
Descripción
La dimetiltriptamina, mucho más famosa como “DMT”, pertence a las drogas psicotrópicas mucho más poderosos por los efectos que genera. Este alcaloide de la familia de las triptaminas es una substancia natural biosintetizada por mamíferos y plantas. Si bien múltiples especies generan DMT, esta substancia generalmente se quita de una planta que medra en América y es abundante en el Amazonas, llamada mimosa tenuiflora o mimosa hostilis.
Drogas psicotrópicas: ¿qué son y cuál es su clasificación?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) divide las drogas que ya están en tres conjuntos distintas, sabiendo los efectos que generan en el organismo: depresores, estimulantes y psicotrópicos.
Las drogas psicotrópicas son substancias psicoactivas que alteran la percepción de la verdad y del tiempo. Causan alucinaciones visuales y auditivas y alteran los sentidos. Es bien difícil distinguir lo que verdaderamente pasa, la verdad y la fantasía se intercalan. Su consumo asimismo actúa sobre el sistema inquieto central, en tanto que altera la función de la serotonina.
Para qué exactamente sirve el DMT en el cerebro
Cerebro
Ciertos deseaban ofrecerle al DMT producido en la glándula pineal la función de producir las imágenes que acostumbran a ser parte de nuestros sueños y asimismo de las pesadillas, en dependencia del carácter alucinógeno de esta substancia. No hay indagaciones firmes que apoyen esta hipótesis.
¿Qué es DMT?
Esta sustancia es una substancia química con poderosos características psicotrópicas que se consigue desde substancias vegetales. En la mayoría de los casos, se toma por vía oral y se puede tomar por ingestión o inhalación. Los efectos que genera su consumo se muestran prácticamente inmediatamente. No obstante, en el momento en que se inhala la substancia, el efecto es mucho más veloz y se evitan las probables reacciones desfavorables que se generan por absorción por el estómago en el momento en que se ingiere el fármaco. La DMT es esencialmente una sustancia psicoactiva alucinógena, con lo que su primordial efecto es generar alucinaciones. Estos acostumbran a estar relacionados con puntos místicos y existenciales. Por esta razón, al DMT asimismo se le llama «la molécula de Dios».
En su presentación, la DMT se puede localizar con apariencia de extracto, o como síntesis refinada. En este último caso, el producto es un sólido pequeño, en general de color blanco. No obstante, si se mezcla con otras substancias, como tiende a suceder en las ventas ilegales, tiene la posibilidad de tener distintas colores. La DMT se considera una substancia enteogénica. Esto quiere decir que se puede hallar en uno o múltiples elementos vegetales. Un caso de muestra de estos elementos es la Psychotria vidris o chacrona, planta usada en la preparación de la ayahuasca, bebida indígena clásico usada por múltiples pueblos americanos.
Una exclusiva sustancia llegó a Eivissa. Se muestra como una parte de un viejo ritual chamánico cuyo propósito es la unión con los espíritus. La sustancia se conoce popularmente como «escamas de rana». Y asimismo ‘molécula de Dios’.
DMT, como se le llama en los círculos científicos, es una sustancia psicotrópica, asimismo famosa como psicodélicos. Son substancias que alteran el estado mental del humano generando percepciones, visiones o pensamientos completamente distintas a los comunes. Dado que perturben el estado del cerebro convirtió a los psicofármacos en enormes socios, exactamente, de los chamanes y los ritos religiosos, tal como de los neurocientíficos, que procuran comprender de qué manera marcha el cerebro por medio de ellos.
La dimetiltriptamina o DMT -popularmente conocida como ‘molécula del espíritu’, ‘molécula de Dios’ o ‘escamas de rana’- es secretada por el cerebro humano en las vivencias próximas a la desaparición y, si bien sea pequeñísima, genera alucinaciones muy profundas y desarrolladas.