En los 2 países mucho más pueblos de todo el mundo, China y también India, hay una grave escasez de mujeres. Por poner un ejemplo, a lo largo de múltiples décadas en China, el país mucho más poblado de todo el mundo, la proporción de sexos al nacer superó con creces la proporción natural de 105 hombres, llegando en ocasiones a 120 pequeños por cada cien pequeñas.
Nota del editor: Sebastián Riomalo es economista y letrado que trabajó como analista económico para el Fondo de Población de las ONU en Beijing. Lideró proyectos en temas relacionados con políticas públicas y el encontronazo social y económico de las transiciones demográficas. Tiene una maestría en Políticas Públicas de la Facultad de Pekín y otra en Administración Pública y Gobierno de la London School of Economics. Las críticas expresadas en este artículo son compromiso única del creador.
En China, cada vez es mucho más bien difícil ser hombre. La narración de An Liang, un trabajador soltero de 30 años atormentado por ahorrar lo bastante para obtener una vivienda y un automóvil, es común en las calles de Beijing. Tus progenitores y abuelos te asistirán con un sinnúmero, pero aun eso no es bastante. “No estoy persiguiendo los ladrillos o las ruedas. Busco tener lo que cualquier mujer me solicitaría que considere ser mi mujer.
INTRODUCCIÓN
Según datos de ONU y la CIA (Agencia Central de Sabiduría), en la actualidad hay en el planeta un 50,5% de hombres y un 49,5% de mujeres (las dos fuentes coinciden en porcentajes).
Sabiendo que la población mundial para este año 2022 es de cuando menos 7.800 miles de individuos según el último informe demográfico de ONU, realizando 2 sencillos reglas de tres:
$30.000 para una mujer
Según el informe, «la política del gobierno chino de limitar los nacimientos y la prioridad cultural por los pequeños» llevó a abortos selectivos por sexo y ha contribuido a la disparidad entre hombres y mujeres.
Como resultado, los hombres chinos, en especial esos en áreas pobres o rurales, no tienen la posibilidad de localizar mujeres para casarse. Ciertos de ellos gastan gigantes cantidades de dinero en la construcción de viviendas con la promesa de hallar una mujer, una inclinación que asimismo está subiendo los costos de las características.