Por su origen, la arena se clasifica en silícea, calcárea y arcillosa. Siendo un componente principal de la mezcla asfáltica, a veces va a ser preciso conjuntar un género de arena con otra hasta lograr las des deseadas.
Mientras que la brisa de verano te acaricia, recoges un puñado de arena blanca, suelta y tenuemente rosada. Los granos se deslizan poco a poco entre los dedos. De pronto te percatas de que esta arena es muy distinta a otras playas que has visitado, llena de guijarros oscuros; o arena dorada. Pero eso no es todo: negras, cobrizos o verdes, hay muy diversos tipos de playas según la arena. (Y asimismo según su forma, su activa de mareas o su fondo…) Las playas son ecosistemas únicos y vivos. Como pasarás unos días disfrutándolos, es buena iniciativa conocerlos mejor.
##Arena de todas las clases
Definición de arena
La arena es una mezcla de pequeños granos de roca y materiales granulares que se define eminentemente por el tamaño, siendo mucho más fina que grava y mucho más gruesa que el limo. Las partículas que lo conforman cambian en tamaño, desde 0,06 mm hasta 2 mm. Las partículas mayores de 0,0078125 mm pero inferiores de 0,0625 mm se nombran lodos.
La arena tiene su origen primordialmente en la erosión de las rocas gracias a los efectos combinados del tiempo, la actividad biológica, la humedad, los cambios de temperatura, etcétera. Aparte de las rocas, la arena tiene la posibilidad de tener su origen en fuentes biogénicas como corales, conchas y huesos.
¿Qué es la arena en la construcción?
La arena se encuentra dentro de los materiales de construcción mucho más usados gracias a los enormes provecho que da.
Está formada por un grupo de extractos sueltos de rocas o minerales de pequeño tamaño (de 0,063 a 2 milímetros), siendo un ingrediente del hormigón y del cemento empleado para la construcción de edificaciones, centros comerciales, rutas y diques , entre otros muchos.
Erupciones volcánicas
Los sunamis ocasionados por erupciones volcánicas tienen la posibilidad de acontecer gracias a una explosión muy beligerante, que hace el colapso de la caldera volcánica. Ahora, empieza un enorme movimiento de rocas, con el océano como destino.
Por otra parte, hay una forma diferente de producir un sunami desde una erupción volcánica: es la mezcla espesa de ceniza, piedra pómez, gas y bloques de roca, llamados flujos piroclásticos. En el momento en que sucede una erupción volcánica, estos flujos llegan al océano, que empuja el agua creando fuertes olas, que en ciertos casos acaban transformándose en sunamis.