El resto de pasajeros y pasajeros del barco, en su mayor parte, dormía en «coys» o hamacas que se colgaban de las vigas entre las piezas de artillería, en las cubiertas interiores.
Desde la invención de la navegación, asimismo hubo piratas. No obstante, es común meditar en estos coloridos individuos en función de las peculiaridades y el contexto de los siglos modernos, mucho más particularmente de los piratas que operaron en la zona del Caribe a lo largo de la llamada Edad de Oro de la piratería, que se extendió en el tiempo entre las décadas de 1650 y 1650. 1730.
Con el Tratado de Tordesillas, la Corona de Castilla consigue el control legal y único de una gran parte de América. El Caribe se encontraba incluido en el botín español y el Maine español, según los ingleses, tenía una actividad comercial rica en metales y modelos bastante sustanciosos para no procurar sacar un trozo del pastel a otras potencias nacionales vecinas a Castilla; o, en lo que aquí nos concierne, por marineros, pechelingues, raqueros, filibusteros, bucaneros, corsarios, piratas, en resumen, ladrones de mar.
Fuentes
- “El barco de los tres puentes en la Armada Insuperable”, de José Ignacio González-Aller Hierro.
- Reales Ordenanzas Navales de 1802.
¿De qué manera era el ron que tomaban los piratas?
El ron que tomaban los piratas se encontraba mucho más salobre de lo que pensábamos. Se conoce que los toneles en los que esos marineros transportaban la cachaça se llenaban con agua de mar una vez dentro para sostener la función de contrapeso. En el momento en que retornaron a tierra, volvieron a llenarse de aguardiente, pero esa cachaza quedó irremisiblemente empapada de la sal amontonada en el envase.
¿Dónde vivían los piratas?
En el momento en que estaban en el mar, los que no eran capitanes dormían al aire libre, en una hamaca o en el suelo. No obstante, había «paraísos piratas». Las zonas del Océano Índico y Madagascar acostumbraban a ser sitios seguros a fin de que los piratas se quedaran, fuera de la ley y el gobierno estatal, eran los reyes de ciertas playas.
No reflexionaron en el mañana.
Vivían solo del día a día y cada día podía ser el último. Los piratas procuraban un modo de vida placentero, si bien fuera corto.
Salvo contadas salvedades, como ciertos corsarios, la mayor parte solo tenía ambición y falta de escrúpulos. El propósito primordial de los piratas era lucrarse lo mucho más veloz viable.