El calor es imposible guardar en un cuerpo, lo que se guarda es energía térmica. Tras cierto tiempo, los 2 cuerpos que están en contacto alcanzan exactamente la misma temperatura y se consigue la estabilidad térmico.
Se charla bastante del almacenaje de energía, pero asimismo existe la oportunidad del almacenaje de calor. Esto lo revela un conjunto de estudiosos suizos que han desarrollado un desarrollo que guarda el calor tomado a lo largo del verano para emplearlo de forma rápida y simple en el invierno, con el beneficio agregada de que la energía capturada se puede transportar físicamente a donde se necesite.
Criado por pesquisadores que trabalham na EMPA (Eidgenössische Materialprüfungs-und ForschungsAnstalt), o novo sistema emplea hidróxido de sódio concentrado (NaOH) como meio de armazenamento térmico y también vários elementos da interfaz para atrapar, converter y también dejar en libertad energia térmica Bajo demanda.
El potencial de los materiales de cambio de etapa para descarbonizar inmuebles.
¿Un depósito de agua ardiente (o fría) puede ser una batería? Sí, si esa energía se puede guardar y emplear en el momento en que sea preciso para dar de comer, por poner un ejemplo, un sistema de calefacción familiar.
Las tecnologías de almacenaje térmico hay ya hace un buen tiempo, pero con frecuencia se pasa por prominente su capacidad, singularmente en las construcciones.
Géneros de baterías
Hay muchos géneros de baterías, pero para su app como almacenaje de energía en redes, las de plomo-ácido, sodio-azufre, sodio-níquel-cloruro y las de ion-litio unos.
Las baterías de fluído se fundamentan en exactamente el mismo principio, más allá de que se distinguen de las precedentes en que, en vez de contenedores cerrados, son enormes sistemas libres donde los electrodos de la batería se bombean todo el tiempo desde tanques, lo que deja enormes habilidades. de acumulacion