GRAVEDAD -La fuerza gravitacional atrae elementos lanzados hacia la Tierra y asimismo sostiene a la Luna en su órbita. -Isaac Newton desarrolló la Ley Universal de la Gravedad. -Sin gravedad, todas y cada una la gente y elementos flotarían en el espacio.
Teorías científicas
La ciencia siempre y en todo momento intentó de argumentar fenómenos supuestamente incomprensibles. En pos de una contestación a el interrogante: ¿Por qué razón no nos caemos de una bicicleta en el momento en que está en movimiento? varios científicos han afirmado que hay que al efecto giroscópico. No obstante, otros ensayos mucho más recientes demostraron que el efecto giroscópico no es la auténtica razón por la que continuamos de manera equilibrada.
Asimismo se dijo que el fundamento es algo popular como Angular Momentum, pero cada vez brotan mucho más cuestiones que prueban que ninguna de estas teorías enseña absolutamente por qué razón una bicicleta no se cae en el momento en que está en movimiento. .
Una esfera impecable sin 365 días
El péndulo de Foucault en París
Sin rotación, el los días no serían exactamente los mismos. Sin el movimiento de rotación, el día duraría 6 meses y la noche otros 6 meses, lo que tendría secuelas aciagas para animales y plantas, y muy probablemente para nosotros). Además de esto, el mundo se transformaría en una esfera prácticamente impecable, sin la agilidad de rotación, que desaparecería por el achatamiento de los polos. Puede parecer algo pequeño y nada dañino, pero es un enorme inconveniente. En verdad, terminaríamos con un solo conjunto de naciones, con los océanos redistribuyéndose y también anegando muchas zonas del mundo, cubriendo los polos.
¿nos encontramos patas arriba en este momento?
Los satélites no caen del cielo pues están orbitando la Tierra. Aun en el momento en que los satélites están a una cantidad enorme de km de distancia, la gravedad de la Tierra sigue atrayéndolos hacia abajo. La gravedad, combinada con el impulso del satélite desde el instante en que fue publicado al espacio, provoca que el satélite entre en órbita sobre la Tierra, en vez de caer al suelo.
Para ingresar en órbita, los satélites tienen que lanzarse primero en un cohete. Un cohete puede lograr las 25.000 millas por hora. Eso es suficientemente veloz para sobrepasar la fuerte atracción de la gravedad y dejar la atmósfera de la Tierra. En el momento en que el cohete consigue la situación adecuada en la Tierra, libera el satélite.