Desde la perspectiva de la salud, la literatura libre señala que el pescado tiene una virtud por el hecho de que tiene un menor porcentaje de grasa en comparación con la carne roja.
Una hoja de papel de calidad descansa sobre todas las mesas del banquete. En él se puede leer: Primero: Creme Parmentier. Segundos: carne o pescado, a tu decisión. En torno al 75% de los comensales, pese a los 5.978 km de costa de españa, optará por la carne, según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Nutrición. El informe elaborado por este organismo mantiene que el consumo de carne fue de 50,13 kg por persona en 2016, en frente de los 25,49 kg del pescado. O sea, nada que ver con las sugerencias dietéticas de la Organización Mundial de la Salud, que abogan por una nutrición mucho más balanceada. ¿Por qué razón esta inclinación hacia los modelos cárnicos? Para George D. Pamplona-Roger, creador de Food That Heal y doctor en medicina por la Facultad de Granada, la contestación está en la hipoxantina, una manera metabólica de las purinas que está en las células musculares de la carne. Su composición química es afín a la de la cafeína y, exactamente la misma la cafeína, estimula el consumo continuado pues actúa como incitante del sistema inquieto. Ciertos aun charlan de adicción. “Consumimos mucha carne y debemos achicar gradualmente esta inclinación. Una cosa es comer pollo o conejo un par de veces a la semana y otra tomar un solomillo o una parte de cordero o cerdo con cada comida. Es suficiente con comer estas sustanciosas carnes una vez por semana. No es necesario mucho más”, afirma Ascensión Marcos, maestra de investigación del Consejo Superior de Indagaciones Científicas (CSIC) y presidenta de Fesnad.
Brain Food
Magro de Cerdo
Opuestamente a ciertos falsos mitos que quizás hayas escuchado, tienes que saber que muchas unas partes del cerdo son bajas en grasa. En verdad, el lomo de cerdo se encuentra dentro de las carnes mucho más magras que hay, en ciertos casos aun mucho más magra que el pollo. La paleta y el lomo de cerdo asimismo se piensan carnes magras. Piezas, a propósito, que están muy, muy ricas.
En la situacion del cordero, existen algunos cortes en especial magros, como la pierna. A fin de que esta parte quede precisamente como la deseamos, es esencial que el carnicero lleve a cabo el corte de forma cuidadosa. Y después, diviértete con este fantástico producto.
Huevos
Los huevos son una fuente rica y económica de proteínas, siendo el alimento con proteínas mucho más terminadas, tanto en calidad como en cantidad. Y en contraste a la carne, el pescado y las legumbres, tu digestión genera poco ácido úrico. Asimismo contienen grandes cantidades de vitaminas (A, Y también y D y del complejo B, si bien no en vitamina C) y minerales fundamentales (ver cuadro adjunto) como fósforo, hierro, sodio y, en menor medida, zinc y selenio. Poseen triglicéridos (formados por ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados), fosfolípidos (lecitina) y colesterol.
Hubo alguna disputa sobre su contenido en colesterol. Su contenido en colesterol es prominente y esto puede ocasionar hipercolesterolemia. No obstante, los fosfolípidos (singularmente la lecitina) bloquean medianamente la absorción en el intestino y, además de esto, los ácidos grasos y el omega 3 que tiene dentro el huevo lo eliminarían del sistema circulatorio. Y como estos están en mayor proporción que el colesterol, el peligro total no es elevado. No es un tema claro ni resuelto, como muchos otros en nutrición, pero el día de hoy se cuestiona la clásico recomendación de no comer mucho más de 2 huevos cada día ni mucho más de diez por semana.
El tocino, por poner un ejemplo, tiene diez ocasiones mucho más calorías que la merluza.
En el planeta de la carne, las calorías marcan la diferencia. Por el hecho de que por exactamente la misma ración puedes consumir considerablemente más, en dependencia del género de carne que hayas escogido. En este sentido, la panceta tiene diez ocasiones mucho más calorías que la merluza, por servirnos de un ejemplo.
Qué comen los cerdos de granja
La nutrición de un cerdo de granja no guarda relación con la de un cerdo familiar.
En ocasiones se nutren de pasto al aire libre, pero o sea menos común. Los cerdos premeditados al consumo humano, que viven en huertas, son alimentados con un sinnúmero de pienso hipercalórico para engordarlos y que ganen peso de manera rápida. Generalmente se usan maíz, avena, trigo y tubérculos y raíces como nabos, zanahorias y rábanos.